Las danzas mapuches son en su mayoría rituales en los que se pide por el buen tiempo, la cosecha o la salud de algún enfermo. Algunos bailes son: el Kuimin, que lo realiza la machi para conocer el futuro; el Purrum, que lo baila la comunidad imitando los movimientos del aire; el Mazatum, que se realiza para el año nuevo mapuche y el Machitum, que lo ajecuta la machi junto a la familia del enfermo para sanarlo.El baile para el pueblo mapuche, así como para la casi totalidad de los pueblos originarios de América, tiene un carácter ritual, de armonía entre el hombre y su entorno y de relación con el misterio de la fe. En el fondo, es uno de los principales testimonios de cosmovisión del pueblo. Por ello, las instancias más importantes de desarrollo de la danza son las ceremonias religiosas.
Es así como el pürún, danza en lengua mapudungún, tiene una importante instancia de expresión en el ngillatún, donde los participantes bailan en filas semi-circulares siempre mirando al altar ritual o ngillatué, el que está siempre orientado hacia el este y, por ende, hacia la Cordillera de los Andes, todos puntos de bienestar y felicidad. También hay danza en la ceremonia curativa realizada por la machi, conocida como machi pürún; y con ocasión del rucán, ceremonia de inauguración de una ruca.
Si bien el baile mapuche es aparentemente monótono, posee una serie de estilos y formas de baile. Por ejemplo, el loncomeu es la danza con acentuados movimientos de cabeza; el ruketu pürún es cuando predominan pequeños saltos; el mellaaschnakm pürún es un baile suave con movimientos marcados en el suelo; y el trafyén pürún es cuando los bailarines se mueven frente a frente. Así también, hay algunos estilos que son más frecuentes o populares, como por ejemplo el choique pürún o “danza del avestruz”, de carácter recreativo realizada en fiestas y rituales; o el kollón pürún o “danza del enmascarado”, el que se baila con ocasión del palín o palitún, el deporte más popular entre el pueblo mapuche.
Los bailes mapuches, así como todos los componentes de su cultura, han luchado fuertemente por su conservación. Lamentablemente hoy estas danzas están casi extinguidas, permaneciendo sólo en aquellos territorios donde la fuerza de la tradición ha permitido la conservación de los rasgos más distintivos de esta cultura originaria.
Es así como el pürún, danza en lengua mapudungún, tiene una importante instancia de expresión en el ngillatún, donde los participantes bailan en filas semi-circulares siempre mirando al altar ritual o ngillatué, el que está siempre orientado hacia el este y, por ende, hacia la Cordillera de los Andes, todos puntos de bienestar y felicidad. También hay danza en la ceremonia curativa realizada por la machi, conocida como machi pürún; y con ocasión del rucán, ceremonia de inauguración de una ruca.
Si bien el baile mapuche es aparentemente monótono, posee una serie de estilos y formas de baile. Por ejemplo, el loncomeu es la danza con acentuados movimientos de cabeza; el ruketu pürún es cuando predominan pequeños saltos; el mellaaschnakm pürún es un baile suave con movimientos marcados en el suelo; y el trafyén pürún es cuando los bailarines se mueven frente a frente. Así también, hay algunos estilos que son más frecuentes o populares, como por ejemplo el choique pürún o “danza del avestruz”, de carácter recreativo realizada en fiestas y rituales; o el kollón pürún o “danza del enmascarado”, el que se baila con ocasión del palín o palitún, el deporte más popular entre el pueblo mapuche.
Los bailes mapuches, así como todos los componentes de su cultura, han luchado fuertemente por su conservación. Lamentablemente hoy estas danzas están casi extinguidas, permaneciendo sólo en aquellos territorios donde la fuerza de la tradición ha permitido la conservación de los rasgos más distintivos de esta cultura originaria.
El atuendo tradicional de la mujer mapuche se compone de:
El chamal o quetpám o küpam, que es un gran paño cuadrangular de color negro, que envuelve todo el cuerpo a modo de vestido, dejando al descubierto el hombro izquierdo sujetándolo con un alfiler en el hombro derecho.
El trarihue, faja que se atan a la cintura sobre el quetpám.
La iculla o iquila, que es un gran paño de tejido muy fino, de color negro bordeado por una franja sus bordes de color azul, fucsia o verde. Este se sujeta en los hombros, se prende al cuello y cuelga largo hasta los tobillos y sirve para abrigarse la espalda.
Finalmente el delantal de percala que aunque es de uso bastante más reciente ha tenido gran acogida dentro del vestuario mapuche y ya se le puede considerar tradicional.
pectoral, formada por dos placas de plata unidas entre sí por tres cadenas; las placasuperior representa a dos aves enfrentadas y la inferior por una doble línea y un motivo labrado al centro, de ésta también cuelgan figuras como cruces, figuras humanas o florales.